BUENOS AIRES.- La presidente, Cristina Fernández, encabezó ayer a la tarde un acto en el Salón de las Mujeres de la Casa Rosada en el que realizó anuncios para los jubilados. Ante la presencia de representantes de gobiernos opositores, como la vicejefa de Gobierno porteño, María Eugenia Vidal, y la vicegobernadora de Córdoba, Alicia Pregno, anunció el envío al Congreso de un proyecto de ley de para abrir una nueva moratoria para facilitar el acceso a la jubilación.
“Esto permitirá la universalización del sistema previsional argentino”, sostuvo, y precisó que la medida alcanzará a más de 470.000 personas. Aclaró, no obstante, que “la Anses se va a reservar el derecho de que esto llegue a los sectores con mayor vulnerabilidad social, para que sea justo y equitativo”.
La jefa de Estado recordó que en la primera etapa “mucha gente que tenía buena posición económica, tuvo su jubilación, y está bien que lo hayan hecho, pero es la misma gente que te critica. La clase media es la más beneficiada y es la que más se queja”.
Para que no quedaran dudas sobre lo que el Gobierno espera para esta moratoria, Cristina enfatizó: “si tenés una situación económica cómoda, este plan no te corresponde”.
En primera fila estuvo sentado el vicepresidente, Amado Boudou. Una vez más, la jefa de Estado omitió hablar de la situación judicial de su segundo en la línea de sucesión presidencial, quien se mostró sonriente durante todo el acto.
Más inclusión
Respecto de la moratoria, Cristina explicó, al hablar por Cadena Nacional -la décimo quinta del año-, que “en la anterior moratoria (2005) se había hecho un corte en 1993 y hasta 2003”. Detalló que el proyecto de ley, “prevé beneficiar a 473.000 personas, que están afuera del sistema”. Podrá acceder a la moratoria cualquier persona que, teniendo la edad exigida -las mujeres, 60 años; los hombres, 65- le falten años de aportes para llegar a los 30 necesarios, y no contar con prestación previsional o percibir hasta una mínima (como Pensiones y Pensiones No Contributivas, hoy de $ 2.757).
Al mismo tiempo, anunció que es decisión del Gobierno convertir a la tarjeta Argenta “en la identificación del jubilado para todo trámite” y que se subirá “de $ 15.000 a $ 20.000 el crédito, y la posibilidad de retirar hasta $ 7.000 en efectivo”. (DyN-Télam)